La variedad de fragancias: nuestras familias de perfumes Fresco, especiado o afrutado: creamos el aroma ideal para cada producto. Nuestras fragancias confieren a los productos de limpieza, cosméticos o velas la nota acorde con ellos. El mundo de las fragancias es sumamente complejo y, por ello, se divide en diferentes familias. A continuación ofrecemos una visión general de estas familias.
Notas cítricas
Las composiciones de perfumes a base de cítricos rebosan de frescor burbujeante y pureza. Como componentes principales contienen aceite de cítricos o sustancias aromáticas cítricas que, en general, se asocian con la limpieza. Las fragancias frescas tanto del limón, la bergamota, la mandarina o el pomelo son ideales para los productos de limpieza para la industria y el hogar, y son un componente esencial de la nota alta de las fragancias para cosméticos.
Notas afrutadas
Las fragancias con una nota afrutada clara y aromática son ideales para champús, suavizantes, detergentes o velas. Nuestros productos afrutados recuerdan al típico olor de la jugosa manzana, la cereza, el plátano o a frutas exóticas como el mango y la piña, y evocan un ambiente veraniego. Se pueden combinar maravillosamente con acentos florales, cítricos y almizcleños.
Notas florales
Sensual y cautivador es el efecto de las fragancias con una nota floral. Aquí las esencias florales pueden dar tanto la nota media como también la nota de fondo o la nota alta de una fragancia. La familia de perfumes florales se divide en las variedades floral fresca, floral exótica, floral con aldehídos y floral dulce. Las notas florales se emplean con frecuencia en jabones y productos cosméticos. Los aceites se componen, por ejemplo, como aromas de rosas, lirios salvajes o jazmines. También son apreciados los bouquets de varias flores que nosotros retocamos con componentes verdes, afrutados, dulces o frescos.
Notas amaderadas
Aceites elegantes que desprenden un olor a madera seca o recién cortada, cortezas o raíces. Las notas opulentas, terrosas y cálidas remiten a la madera de sándalo, cedro, pachuli o el olor de la hierba tropical vetiver. Las notas amaderadas son un complemento ideal a las fuertes notas de salida como los acordes cítricos, verdes o afrutados. Las fragancias amaderadas se emplean en numerosos perfumes de hombre y de mujer, así como en geles de ducha, productos de limpieza y detergentes para la ropa.
Notas balsámicas y dulces
Un acorde dulce con un carácter cálido y sensual es típico de las fragancias balsámicas y dulces. Los componentes principales de esta familia de perfumes son la vainillina, la vainillina etílica, la heliotropina, la cumarina pero también el maltol. Las composiciones que obtenemos a partir de estas notas nos gusta rematarlas con acentos florales, afrutados, herbáceos o amaderados. Los perfumes son ideales para los productos cosméticos y también para las velas.
Notas orientales
Las fragancias con un carácter aromático y sensual las creamos individualmente, según sus ideas. Ingredientes como el clavo, cardamomo, pimienta o cilantro son componentes esenciales junto con las flores blancas, intensas y narcóticas. El pachuli, los matices a bálsamos amaderados, la vainilla y las notas animales forman el fondo completo. La nota alta se caracteriza por acentos cítricos frescos. El carácter de las maderas y resinas sensuales, así como la intensidad y el dulce de las composiciones evocan al mundo árabe. En esto se basa la nota de moda oud, que se emplea en los productos para el hogar y de higiene personal.
Notas florales y orientales
Como en el mundo de la moda, también en el mundo de los aromas siempre hay nuevas tendencias. La familia de fragancias florales y orientales viene pisando fuerte en los últimos años. Esta familia aúna la levedad de los perfumes florales con la intensidad y sensualidad de las notas orientales. El aroma a flores dulces, combinado con acentos aromáticos suaves y los acentos orientales graves, es lo que la caracteriza.
Notas hierbas
Esta familia de perfumes se caracteriza por una nota fresca, clara y natural. Las fragancias a cuero y a hierbas las fabricamos, por ejemplo, a partir de lavanda, romero, artemisa o salvia. Las composiciones a cuero y a hierbas son muy apreciadas también para los cosméticos para el hombre así como en los productos para el hogar, detergentes en polvo y suavizantes. Tienen un olor especialmente aromático y son componentes importantes de los perfumes fougère.